La Escuela Juan Antonio Medina de Horco Molle celebró su acto de colación
La Escuela Juan Antonio Medina, ubicada en la localidad de Horco Molle, llevó adelante su acto de colación 2020 en donde estudiantes de nivel inicial y primario pudieron celebrar su fin de ciclo, bajo estrictos protocolos de bioseguridad.
Participó del encuentro el ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer; el intendente de Yerba Buena, Mariano Campero; el secretario de gobierno, Pablo Machiarola y la secretaria de Educación del Municipio, Victoria Desjardins, quienes fueron recibidos por la directora de la institución, María Magdalena Villagra y la directora de nivel inicial, Silvia Nazar.
“Quiero agradecer de todo corazón a la directora y las docentes que han hecho de este lugar verdaderamente un vergel de emociones, de unión a todas las familias que han estado presentes y a los chicos. Es una emoción enorme ver que se va multiplicando la posibilidad de homenajear, de decir gracias, y también a la docencia poder expresar lo que toda la familia y sociedad siente, y es que no han aflojado nunca y han estado a la par. Es una etapa que se va cerrando y que todos deseamos que dé paso a una mejor”, sintetizó el titular de la cartera educativa.
A su turno, la directora del establecimiento educativo comentó: “En el día de hoy hemos vivido no sólo un hermoso acto sino también un momento inolvidable, la presencia de ministro de Educación ha hecho gala de esta institución. Nos hemos sentido orgullosas de poder recibirlo en nuestra casa y poder compartir el final de esta etapa tan difícil, en un año tan complejo, donde la adversidad nos ha puesto a prueba para poder salir adelante en la etapa de aislamiento obligatorio causado por esta pandemia que nos causó preocupación y desvelo, pero no por eso hemos dejado de cumplir con nuestras tareas”.
A su vez, Villagra contó que desde la institución han hecho “el mayor de los esfuerzos para que todos los chicos puedan recibir sus tareas, acompañando desde la escuela. Nosotros desde el primer día hemos abierto las puertas, teníamos una actividad esencial que era el comedor y abrimos la escuela para que todos vengan, consulten, retiren sus hojas. La familia y la comunidad han sido un soporte, hemos trasladado toda nuestra tarea educativa a la casa y trabajado como equipo”.
Finalmente, María Cecilia Ovejero, profesora de Música próxima a jubilarse, manifestó: “Tengo 39 años de servicio y creo que esta es la última escuela que voy a tener y poder contar experiencias. Con tantas cosas vividas en distintas escuelas, nunca había imaginado que iba a vivir una situación de pandemia, extraordinaria para todo el mundo, donde no estábamos preparados y se hizo necesario un aprendizaje de muchas cosas. Vale la pena quedarse con lo positivo y lo que se pudo hacer y aprender de casa usando WhatsApp, Internet y todo lo que se nos podía ocurrir. Hoy puedo decir que ha sido placentero, me voy muy satisfecha”.
